sábado, junio 30, 2012

Piscina Municipal: ¿un bañito?


¡Bienvenido a la piscina municipal!, el lugar donde los peces son personas. Acompáñenme en este maravilloso viaje al acojonante mundo de las piscinas municipales.

Todo comenzó cuando a alguien se le ocurrió cavar un hoyo, allá, en el paleolítico y... ¡Oh, milagro!, llovió y se llenó.
La gente, los prehistóricos, asombrados, comprendieron que se podía sacar partido de este charco grande y empezaron a meterse. Poco a poco. Primero un dedo, luego un pie, después hasta la cintura (que es una zona delicada en los climas fríos), luego dejando sólo la cabeza fuera y, finalmente, hacia el 1.527 d.C., TODO.
Es la simple evolución de la especie humana en conjunto lo que nos ha llevado a la situación actual.

De hecho, la extinción de los neanderthales parece que se debió a cortes de digestión (que era más larga que la de los homo sapiens) y a que, joder, alguien tenía que decirlo, eran malísimos nadando, pero muy chulos, y se tiraban en las zonas donde más cubría para impresionar a sus hembras.

Luego alguien vio que se podía hacer negocio de esto y… "voilá", tenemos una piscina municipal en toda regla.

En la actualidad, es como un zoo. Hay de todo nadando. Los homo sapiens hemos pasado de ser una especie que se bañaba a ser una especie que, cundo se planta el bañador y el gorro de piscina, genera una cantidad de subespecies casi inabarcable.

Pero la piscina tiene unas normas, sí señor. Sólo faltaba. Toda sociedad civilizada que se precie debe regirse por unas leyes y un saber estar.

Normas de la piscina municipal:

1.    Saber nadar
2.    Llevar bañador
3.    Llevar gorro de piscina
4.    Ducharse antes de entrar

Eso es así, incuestionable. Pero, como todo... Tiene matices.

Vamos a ver, ¿Saber nadar?, yo he visto gente que hacía bueno a Moussanbani. A parte,  ¿y si sólo vas a tirarte y salirte del agua 843 veces porque te sale de las narices?

Llevar bañador.... Sí, esta norma es realmente necesaria. Aunque... el bañador de Borat es un bañador, pero yo no sé si nadaría en la misma calle que alguien que lo llevara. Bueno, ni en la misma ni en la de al lado.

El gorro de piscina, el gran invento.

- "Hola, soy calvo, ¿tengo que plantarme el gorro?"
Repuesta: "Cla…ro".

¡Pero coño, si hay gente que se mete en el agua y tiene pelos hasta en la palma de las manos! Y encima, dejan un reguero de pelánganos flotando que pueden llegar a crear acumulaciones en forma de pequeñas balsas.
Un puto asco.

Pregunta: "hola, mire qué pedazo de tirita llevo en el dedo del pie. ¿Sabe que la llevo puesta desde esta mañana y soy vigilante de parquímetros? ¿Puedo bañarme con ella?".
Respuesta (ojo, ¿eh?): "Cla…ro".

¡¡HAY QUE JODERSE!! ¡Pero qué puto asco! ¿No ves que la jodida tirita acaba flotando por toda la piscina y dan ganas de potar con que se enrede en las gafas o simplemente te  roce?

Respuesta: "ya, pero si ves la herida purulenta que tengo debajo, fli…pas. Eso sí que da asco".

Joder.

¿Y lo de ducharse antes? Es una medida muy higiénica, después de lo que acabamos de leer, seguro que eso preocupa mazo.
¿Que tiene una pústula como un sello de grande y va dejando pelos por la piscina?, bueno, si se ducha y lleva el gorro de baño, todo en orden.

Pero bueno, superados estos detalles sin importancia (¿), te plantas las gafas y ya ves menos que Pepe Leches. Porque las gafas de piscina NO se empañan el primer día, pero el resto… El caso es que te metes: algunos se creen que esto es un concurso de salto y otros parece que lo pasan hasta mal.
Y nadas.

- "¿Cuánta gente hay en tu calle?
- "Sólo 4 sin contarme yo".
- "Joder qué suerte. En la mía hay 7".
- "Ya, es lo malo de que 8 de las 10 calles estén ocupadas por clases de "natación"”.

Y nadas. Bueno, primero te incorporas a la línea y esperas que todos sean del mismo nivel. Porque adelantar con tanta gente puede ser realmente peligroso.
No, lo peligroso son las uñas de los pies del menda que va delante de mí. Son mejillones. Y pueden llegar a cortar si entre las burbujas acercas demasiado la mano.

A tomar por saco, ya me he cansado de nadar. No puedo nadar a mariposa como a mí me gusta porque podría ir a la cárcel por agresión, corro riesgo de cortes por arma blanca (recordad esos mejillones amenazantes), tengo una tirita con restos de Mercromina entre los dedos (se ha enredado) y estoy harto de ver flotar pelos.
Y como tiene tanto cloro el agua, parece que la piel se me va a rasgar.

Típica conversación:

- “Oye, ¿has visto la piscina municipal que nos han puesto? Hay que ir, ¿eh?”.
- “Sí, es la leche… pero es que nadar es muy aburrido”.



(Excusa muy buena para no ir porque te da asco, porque encima es verdad: nadar es un coñazo).

2 comentarios:

Unknown dijo...

jajajaja no sabes qué identificado me siento con este post que has colgado. Cada una de las cosas que dices es más cierta que la siguiente.

Pero ¿qué me dices del típico señor mayor despistado que nada a braza, sin meter la cabeza debajo del agua y que lo hace en el carril de nivel más alto? ¿tío no te das cuenta que molestas y que te estamos adelantando todo el rato? Vete al carril de tu nivel por Dios.

Lo de la tirita... pufff más real imposible... Y qué me dices de las heridas que te provocan los objetos que separan los carriles, o cuando escuchas alguna pelea entre dos porque uno le ha dado un tortazo a otro con la mano al nadar. O las típicas marujas que van a la piscina y se quedan hablando en la orilla.

Lo cierto es que nadar en una piscina municipal es un mundo y un coñazo, pero al contrario de lo que dices, a mí nadar no me aburre, me encanta.

Zola dijo...

Jajaja
Me alegro de que te guste el post y de que te guste nadar!

Tienes razón, quizá dé para una segunda parte el mundo de los adelantamientos, los corchos separadores de calles y el agüilla de las duchas.....

Igual si comenta más peña me animo.. Jajaja
Un poco de chantaje no hace daño a nadie! Jeje

Siempre gusta leer comentarios, gracias.

;-)