El otro día tuve un problema, un atasco. Es un problema al que se enfrenta la gente muy a menudo, yo lo sé, pero como uso mucho el tren, ya no me acordaba. La verdad es que no fue un atasco de esos normalitos, de media hora o así. No señor, jeje, a mi me tocó EL GRAN ATASCO. Bueno, realmente pasa todos los días y... ¡más de una vez al día!. Lo que pasa es cuando le toca a uno en sus carnes... pues jode, y si ese uno tiene un blog, pues lo escribe.
Vamos a situarnos: para los que son de Madrid, basta con decir que era en la M-30, un jueves a eso de las 8 y con partido de liga en el Calderón (jugándose el entrar en la UEFA); para los que no son de Madrid, diré que es como meterse en un circuito de trampas (estan de obras en todo el trayecto) justo cuando todo el mundo parece que ha tenido la misma feliz idea que tú: meterte en la boca del lobo lloviendo. A eso súmale que se juega un partido en un estadio de fútbol que da a ese circuito de locos y hay salidas cerradas y todo.
Vamos, que era como entrar en un laberinto lleno de badenes, coches, agua... como las carreras de los "Autos Locos" (los dibujos animados que había de pequeños), pero sin moverse, ¡claro!. ¿Que cómo puede ser es eso?... en ese atasco parecía que retrocedíamos en vez de avanzar.
Esto me demostró una teoría: siempre me pongo en la fila de los lentos, también llamados tontos. La pregunta es: ¿por qué los llaman tontos?. Porque yo siempre, me cambie a donde me cambie, estoy en esa fila y, ¡joder!, yo no me considero tonto. Claro, que piensas: "bueno, hay mucha gente como yo, jeje..."; pero coño, no dicen por ahí que "mal de muchos consuelo de tontos". Coño, ¡¡que no soy tonto!!. Aunque, sinceramente, entre nosotros, cuando te tiras una hora y media en un atasco... se te queda cara de tonto.
Lo más gracioso de estos casos es fijarse en los coches de alrededor. Vaya fauna, como los personajes de la serie esa que decía antes. Claro, que yo también formo parte de esa fauna, pero ya habrá otros post de esa gente donde hablen de lo que me toque, ¿no?.
Vamos a ver, hay de todos los tipos:
- "los solitarios". Van solos en el coche, engloban más tipos. Suelen ir cantando como si no los viera nadie... que equivocados están, TODO EL MUNDO LOS MIRA. Hasta muchas veces andan tocando la batería en el volante... ¡la de promesas de la música que se ha perdido OT!. Lo cierto es que resultan bastante ridículos, pero no lo ocultemos: todos lo hemos hecho. Y lo peor es que hay momentos que perdemos un poco la consciencia y creemos que lo hacemos hasta bien... los que no tienen oído disfrutan de su sala de grabación particular.
- "los apretaos". Son los que van ciento y la madre metidos en un seiscientos, que casi tienen que llevar las ventanillas abiertas para sacar los brazos (y eso si bajan)
- ¿y qué me decís de los niños?, esas dulces criaturas con 1000 preguntas para hacer en estos casos y que si van más de dos unidades en el coche, se suelen pelear. A parte de los que ven llover y les entran las ganas de mear, tal cual, como quien aprieta un botón. "Los coches guardería".
- la versión "me pego bien al volante no vaya a ser que se caiga o tenga que manejarlo con los piños". en esta versión está la variante Señora Mayor y Señorita Joven. Se han hecho muchos estudios y se ha demostrado que no todas las Señoras Mayores Pegadas Al Volante fueron Señoritas Jóvenes Pegadas Al Volante. Cosas de la ciencia.
- "los mineros", también llamados "prospectores" o "torres petrolíferas articuladas". Vamos, los cerdos de siempre que se meten el dedo más hábil del que disponen para sacar el berberecho mas grande que encuentren. Es recomendable no mirar mucho cuando se ve a uno, por si la extracción llega a buen término y eso acaba... bueno, dejémoslo.
- "los poligoneros": dícese de la gente que hace botellón en los polígonos. Llevan la música tan alta que no se oyen ni pensar lo típico de: "joder, estoy en la fila de los tontos".
- "los estresaos" o "cagaprisas". Estresan al resto, se estresan a ellos mismos... ¿dónde irán con tanta prisa?
- "los accidentados" y "averiados". A mí me ha pasado un par de veces. Están tan ocupados con lo suyo que es mejor no molestarlos con comentarios. Pero siempre presentan dos caras: o de cabreo/sorpresa o de susto/palidezextrema.
- "los buitres de la ambulancia". Dan tanto asco que paso de comentarlos, que deje alguno un comentario y que expliquen por qué hacen eso.
Hay una máxima en el mundo de los atascos: "sabes cuándo entras, nunca sabes cuándo sales".
¡Nos vemos en el próximo atasco!, hasta entonces: no corráis.
4 comentarios:
Después de un estupendo día de empolle de doce horitas no hay nada mejor que sentarse a lo perro pachón en la silla e inspirarse leyendo ese post. Grandes recuerdos y vivencias me han aportado en estos momentos tan duros del mes, año y lustro. De acuerdo, exagero pero son doce horas de chute en las neuronas.Algún efecto secundario produce.
Si nos fijamos en la raíz de la palabra ATASCO nos daremos cuenta que procede del árabe AJCO, es decir, que menudo cachondo el primero que se paró porque se para a ver un accidente que no le tiene que importar¿Por qué la gente en lugar de seguir circulando frena de forma exagerada cuando ocurre algún incidente?Razón muy posible de la causa de un atAJCO.
Pero volviendo al tema, precisamente se pensó en la raíz árabe precisamente por los pozos petrolíferos nombrados en el blog, aunque realmente tienen su origen en los pozos de agua inventados ya hace varios cientos de años. El último está en la casa de OriginalFree.
Gracias por recordar esa parte histórica de la Comunidad de Madrid, los atascos. Bienvenido a la Asociación A.T.A.S.C.O. (Asociación de Tontos Atascados Sin Causa Obligada).
Miembro honorario mañanero de A.T.A.S.C.O.
juas juas juas... muy bueno:D
juas juas, muy bueno:D
Coño, con la aficion que le habias cogido a esto del blogging a escribir en rima en blogs ajenos y lo tienes abandonadisimo... Una pena no seguir leyendo tus criticas. Venga, que no decaiga a retomarlo.
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