jueves, mayo 31, 2012

Jueves en el mundo. "Sábado" en Jeddah


Jueves, 6 de la mañana… suena el despertador… hay que levantarse…

Hasta ahí, un jueves normal, ¿no? ¡Pues no! En Jeddah, como en toda Arabia, el jueves es el “sábado”. Que, ¿por qué? Ni idea. Pero así es.

Y entonces… ¡¿¡¿qué haces despierto a las 6 am?!?! Pues ir a bucear. Sí señor, ir a bucear al Mar Rojo. Por 40 €. Bueno, eso yo, que hago snorkel, los buceadores pagaron 60. Mi alquiler de aletas costó 2€.

Bien, resulta que en Jeddah, cuando te levantas a las 6 de la mañana es perfectamente de día. Ni rastro de la noche. Y tampoco hay mucho rastro de nadie en la calle, menos mal. Ya sería la leche. Bueno, algún corredor sí se ve. Pretenden a provechar que no aprieta aún el calor… pero, aún así… ya son ganas.

Es alucinante la cantidad de palacetes que hay en Jeddah. Pero más acojonante aún son los cochazos que se ven. Todos los coches de alta gama que te puedas imaginar, están en Jeddah. Todos los palecetes por metro cuadro que siempre quisiste tener, están en Jeddah. Todas las playas privadas con embarcadero y 15 filipinos que hacen las tareas del hogar, están en Jeddah.


Toda esa gente que está acostumbrada a que le hagan todo y no ha pegado un palo al agua en su vida (ni lo va a pegar), están en Jeddah. Y es que, es tan así como lo cuento. Aquí la gente con pasta, que son un huevo, no han tenido que hacer nada para ellos mismos en su vida. Se lo dan todo hecho. ¿Cochazo acojonante?, hecho. ¿Limpieza de casa?, hecho. ¿Cuidadora de niños mientras me toco las bolas?, hecho.

Y claro, alguno dirá: “eso en Madrid también pasa”. Ya, sí, puede ser. Pero no lo ves por todas partes y con tanta evidencia. Es como si el barrio de Salamanca ocupara toda la ciudad y fueran todo “chaletes” y palacetes.

Bueno, volviendo al buceo… De camino al punto de partida, descubrí que la gente no estaba en su casa en vez de estar en la calle (RECUERDO QUE ERAN LAS 7 DE LA MAÑANA). La gente… joder, la gente… la gente estaba en la playa pública.

Impresionante. 

En España quien baja a coger sitio a las 10 ya parece un loco y aquí a las 6 (o antes, pero no lo pienso comprobar) ya están abarrotando la playa. Claaaaro, que luego sale el sol y los achicharra. ¡Hay que aprovechar cuando la quemadura que me llevo sólo es de primer grado!

Llegamos al sitio, todo muy bien montado, como todo aquí, la verdad. EN un compound de ÁRABES ricos con playa privada. Flipante, como “La Finca” pero con playa. Un “HAPPY FAMILY” árabe en su jueves/sábado.

Nos van a montar en el barco y…. ¿no será ese pedazo de yate? ¡Pues claro que no!, no te jode. ¿Por 40 € vas a ir en un yate que ni Emilio Botín?, no nos pasemos. 


El caso es que el menda del yate es el dueño del compound, que viene a ser como si tienes un yate en la playa privada de esa zona que has dejado, bajo tu absoluta magnificencia (y cobrando un pastizal), que sea ocupada por gente que tiene el dinero por castigo. Cuando digo “el dinero por castigo” me refiero a que el que tiene un Porsche Cayenne es un pringao.

Una vez en el barco, pudimos apreciar, saliendo de este entrante del mar, cómo es cierto que todavía hay casas de particulares más acojonantes que el compound ese y que cualquier palacio de la ciudad que hubiéramos visto. Playas, zonas de juego, zonas de fiesta (?) encima del agua…  parece que el dinero les fluye, sí. Parece que no tienen problemas para llegar a final de mes, no.









Nos metieron mar a dentro durante una hora y media y nos soltaron en un arrecife. VI UNA TORTUGA. Impresionante, lo mejor del día. A dos metros. PUFFF… :-D


El agua perfecta, a una temperatura…

Después de eso nos movieron a otro sitio con el barco y, lo mismo, pero sin tortuga.

Después de esa inmersión nos dieron arroz con pollo y ensalada. Ya antes habíamos tenido patatas, bollos, donuts… cocacola, sprite… de todo un poco, pero nada de alcohol, ¡claro!

Y todavía pudimos bucear en otro arrecife más.

Son impresionantes los peces loro. ¡Hay muchísimos! Y de todos los colores. Aunque, la verdad es que hay corales y peces de todos los colores en general. Realmente bonito.

Y volvimos a las 6 de la tarde. ¡Un día muy completo!
Un sábado en Jeddah. Algo habrá que hacer, ¿no?

Por cierto, a ver cuándo hago un post de cómo conduce aquí la gente. Lo puedo definir en dos palabras: TE CAGAS. Si habéis visto la serie de “los autos locos”… Pulgoso sería feliz aquí (si fuera un gato… porque siendo perro… me da a mí que se los comen… espero no haberme comido ninguno…)

2 comentarios:

Unknown dijo...

hola, yo estoy pasando unos meses en jeddah por trabajo y aun no se como aprovechar mi tiempo libre.
Me gustaria bucear pero soy incapaz de encontrar ningun sitio para practicarlo seguro.
podrias decirme donde y con quien hablar para ir al mar pasar el dia??

Zola dijo...

Hola Héctor,

Yo hice esa excursión con "Desert Sea Divers", en North Obhr.

Fue una actividad cojonuda. También hay grupos de corredores que salen a primera hora de la mañana y de ciclistas también!

En la playa privada del hotel Sheraton también se puede bucear.